El Área Tecnológica de Inteligencia Ambiental tiene dos objetivos claramente diferenciados.

Por un lado pretende realizar un seguimiento de la evolución de la inteligencia ambiental (AmI), desde el punto de vista paradigmático, y atendiendo a la aparición de nuevos conceptos derivados de la multitud de campos de aplicación. Actualmente su actividad se encuentra enfocada en el desarrollo del concepto AAL (Ambient Assisted Living), que se entiende como la aplicación del paradigma AmI para extender el tiempo que las personas mayores viven de manera independiente en sus casas. Dentro de este primer objetivo, también se engloba el modo en que se desarrollan las aplicaciones de AmI desde el punto de vista del usuario de las mismas (invisibilidad tecnológica, facilidad de uso, sistemas intuitivos), así como el seguimiento de las implicaciones éticas que el AmI plantea en su desarrollo.

Su segunda y principal línea de actuación, es la del desarrollo de tecnología propia de inteligencia ambiental, entendida como la creación de arquitecturas de referencia, plataformas de integración de sistemas distribuidos, y herramientas de integración de dispositivos masivamente distribuidos por el entorno físico en el que viven las personas.

Desde el punto de vista tecnológico esta área de conocimiento actúa estrechamente coordinada con el resto de áreas tecnológicas del grupo TSB, actuando tanto de impulsora para el desarrollo de aplicaciones en cada una de ellas, como de receptora de los servicios tecnológicos que proveen: herramientas para la gestión del conocimiento, plataformas software, sistemas inteligentes, comunicaciones inalámbricas de corto y medio alcance y comunicaciones y sistemas móviles. Todas ellas juegan un papel clave para el desarrollo del concepto del AmI, de modo que la actividad principal desarrollada es la de la integración tecnológica, teniendo en cuenta las arquitecturas de referencia necesarias para construir un sistema de inteligencia ambiental realmente útil para las personas.